Responsable Plan Igualdad
Victoria nos envía las plantillas de los marcapáginas (aunque están
personalizados con el nombre del instituto), y el texto que se fue leyendo por
las clases cuando se repartían.
¡Buenos
días, compañeras y compañeros!
Hoy,
8 de marzo, como todos los años en esta fecha, celebramos el Día Internacional
por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional. Y, aquí y ahora, nosotros venimos a compartir con todos
vosotros una realidad, que aunque
mejorable, empezó siendo un
hermoso y lejano sueño.
En 1911, un trágico incendio en una
fábrica de Nueva York costó la vida a 146 jóvenes trabajadoras comprometidas con su tiempo, dejando patente las
condiciones infrahumanas e injustas de la vida en esa sociedad industrializada
de principios del siglo pasado. Estas mujeres representan con su muerte un antes y un después en nuestra
conciencia colectiva. Hasta entonces, la historia había sido contada
exclusivamente por los hombres. Pero
después de siglos de anonimato femenino, en el mundo se abría un nuevo camino,
más plural y diverso.
A
raíz de éste y otros sucesos de igual importancia, se produjo en el mundo una
serie de cambios en la legislación a favor de los derechos y protección de las
mujeres trabajadoras. Una nueva conciencia de igualdad nacía. Las mujeres
dentro de la sociedad empezaban a tener
voz y sus peticiones eran escuchadas.
En
estos días que preceden a la primavera, esta celebración generosa nos sirve
para recordar el camino comenzado, pero inconcluso y la necesidad de
colaboración entre todos para proseguir, alcanzando metas y derribando
murallas.
Despertemos
nuestras conciencias y contemplemos cómo, con nuestro esfuerzo, cualquier
tiempo futuro será mejor.
Gracias Victoria, nos siguen enriqueciendo tus aportaciones
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